Por Dra. Sandra Lanza
@dra.sandra_lanza_sagardia
Creadora del programa «Tu versión más saludable»
Atención presencial en Centro Médico CCdM y Clínica Beunique
Si descontamos las horas que dormimos, pasamos la mayor parte del día en nuestro trabajo, pues las jornadas laborales en nuestro país son muy extensas, a lo que se suma el tiempo utilizado en movilizarnos hasta nuestro lugar de empleo.
Así, el ambiente y las condiciones en las cuales trabajamos van a ser un factor determinante de nuestra salud, lo que es preocupación de organizaciones como la OMS y la Organización Internacional del Trabajo.
Un factor crucial es la alimentación durante el horario laboral. Es habitual que por falta de tiempo no llevemos nuestro almuerzo y que compremos comida rápida, galletas o snacks tipo chatarra. Y aunque muchas empresas otorgan almuerzo, no siempre son las mejores opciones para nuestra salud.
Por lo anterior, siempre que sea posible llevemos nuestra comida, frutas, aumentemos el consumo de agua y evitemos consumir galletas o pastelería refinada.
SEDENTARISMO
El sedentarismo es otro tema que merece preocupación. Según la Encuesta Nacional de Salud del 2020, el 91% de la población chilena es sedentaria, presentándose como el principal factor de riesgo de muerte prematura prevenible.
Algunas recomendaciones para quienes pasan muchas horas sentados, es realizar pautas activas, alzar los escritorios o computadores para trabajar durante algunos minutos de pie, sentarse en una pelota de pilates, poner la alarma cada 1 hora y caminar o realizar algún ejercicio de elongación durante un par de minutos. Si es posible cuenta los pasos que das al día y recuerda que sobre 7 mil ya puedes obtener beneficios para tu salud, cada paso cuenta.
ESTRÉS
Otro factor sumamente relevante es el estrés, el que puede ser desencadenado por varios factores: algunos laborales con jornadas extensas, alta carga laboral, estilos de liderazgo y estructuras organizacionales poco adecuadas, entre otros.
Además de factores laborales cobran relevancia problemas familiares, de pareja, endeudamiento y la sobrecarga por tareas domésticas, tema que es mucho más frecuente en las mujeres, quienes además en el ambiente laboral muchas veces estamos expuestas a hostigamiento, invisibilización, mansplaining o masculinización de las conductas para ser valoradas. En este sentido recomendamos que cuentes con técnicas para el manejo del estrés y busques apoyo cada vez que lo consideres necesario.
DESCANSO
El no tener un sueño o descanso adecuado en cantidad o calidad afectará nuestra salud física y mental y por supuesto nuestros desempeño laboral.
Por tal motivo las organizaciones modernas tienen como eje central la preocupación por la salud y bienestar de sus funcionarios, el tener funcionarios sanos, se traduce en una organización sana que está en mejores condiciones para avanzar en el logro de los desafíos de la organización a la que pertenecen. Además es un ahorro el que viene dado por las menores consultas médicas, menor gasto en medicamentos y menos días de ausentismos laboral.
Busquemos contribuir a crear un ambiente saludable en nuestros lugar de trabajo desde el lugar que ocupes, pero sobre todo si tienes algún rol directivo busca potenciar esta área en tu organización.
“Los empleados quieren saber que son importantes y quieren ser tratados como personas, ese es el nuevo contrato de talento”, Pamela Stroke