Frío, peligro y soledad, acompañan su historia. A sus 42 años lleva en el cuerpo unas 70 expediciones por los rincones más inhóspitos de la Patagonia, Antártica chilena y en el Ártico, lo que lo convierte en el único chileno en realizar expediciones largas en ambos polos. Fiordos cubiertos de hielo, islas rocosas, glaciares por doquier y estrechos canales conforman el obsesivo objetivo del explorador más destacado de Chile, Cristian Donoso Christie, un referente mundial en territorios vírgenes con riesgosos y hasta mortales accesos en la zona más austral del mundo. Sus periplos han sido publicados en más de 23 países y traducidos en 12 idiomas.
Además de dar clases como profesor de navegación e investigador de la carrera de Ingeniería en Expediciones y Ecoturismo de la Universidad San Sebastián, Cristian Donoso es uno de los pocos seres humanos dispuestos a hacer lo que soñó de la vida, o transformar la vida en un sueño. Sí, ha enfrentado situaciones críticas donde la fortaleza mental y la capacidad de tomar buenas decisiones lo libraron de la muerte. ¿El escenario? Expedición en kayak por la isla Campana al sur del Golfo de Pena en 2016.
“Había una ola muy larga que venía del oeste de más de siete metros. Al principio navegamos con exceso de confianza – craso error de un experto -, íbamos subiendo y bajando hasta que entró un viento sur que formó una ola vertical cruzada mientras una corriente nos empujaba muy fuerte hacia el norte, era un hervidero de olas gigantes. Nos dimos vuelta varias veces pero seguíamos dando la pelea. Pasaban las horas y nos empezamos a marear, lo que dificulta la lucidez y buena toma de decisiones, pero finalmente, tras 5 horas, pudimos encontrar un punto de salida entre algunos islotes que nos brindaron protección. Aquella experiencia fue por lejos la condición de mayor riesgo navegando en kayak”, recuerda Cristian.
El explorador más destacado de los últimos tiempos lideró en Antártica el 2010 el primer ascenso, la primera travesía integral y el primer descenso a pie del Plateau Herbert, abriendo una nueva vía de acceso entre el plateau de la península Antártica y el mar. Asimismo, realizó la segunda expedición en la Península Antártica que utiliza kayaks como embarcación y trineo, consiguiendo así la ejecución de una travesía cien por ciento autosuficiente por tierra y mar, sin depósitos previos ni ninguna clase de apoyo externo y sin abandonar equipos ni dejar el menor rastro.
Recién llegando de Estados Unidos y Canadá, tiempo que aprovechó para ver a su pareja y visitar algunos amigos, Cristian Donoso se da el tiempo para relatar a Costa Magazine las travesías de 2017 y primer semestre 2018, junto a los planes que maneja para fin de año.
Cuéntanos más sobre la expedición en la Antártica a comienzos del año pasado navegando en kayak por rutas inexploradas.
“Realizamos una travesía junto al español Roger Rovira y el chileno Ezequiel Lira en kayak por una ruta que no se había hecho antes, con un objetivo que no se había planteado: unir las islas principales del archipiélago Shetland del Sur. Unimos las islas Livingstone, Greenwich, Robert, Nelson y Rey Jorge. Una expedición autosuficiente de 11 días y 300 kilómetros, donde cargábamos todo nuestro suministro sin ayuda externa. Hicimos el recorrido por la parte norte del archipiélago, la más desconocida e inexplorada por los peligros que conlleva”.
¿Cómo fue llevar a cabo la misión imposible del glaciar Stoppani?
“Era una especie de misión imposible, tal como había publicado una expedición inglesa en American Alpine Journal. A pesar de todo, luego de 20 días en la Cordillera Darwin, logramos pasar toda la parte baja del glaciar llena de grietas y bloques de hielo con el objetivo de subir el monte Stoppani, una cumbre virgen que no tiene ascensos. Finalmente y tras 8 intentos, logramos subirlo o remontarlo. Lamentablemente fue tanto el tiempo que nos demandó la travesía – además de esperar condiciones de viento de 100 kilómetros por hora, temperaturas muy frías y escasa visibilidad – que nuestros suministros fueron insuficientes para permanecer más tiempo y alcanzar la cumbre”.
Ya en febrero del presente año realizaste una expedición “religiosa” a Tierra del Fuego…
“Gané un Fondart para realizar en velero una travesía a Tierra del Fuego con la misión de replicar el registro fotográfico de distintos glaciares de la Cordillera Darwin que hizo unos cien años atrás el sacerdote salesiano Alberto María de Agostini. Para ello seleccionamos 10 imágenes de un total de 11 mil que conserva el Museo Salesiano de Punta Arenas. El proyecto consistió en recorrer, mediante navegación y montañismo, los puntos exactos donde Agostini capturó esas imágenes hoy conservadas como negativos en placas de vidrio. Comparando las fotografía actuales con las del sacerdote queda manifiesto el retroceso de los glaciares, lo que refleja la globalidad de las acciones humanas respecto a la quema de combustibles fósiles. Por otro lado, se aprecian nuevos bosques y toda su diversidad en lugares donde antes habían glaciares. La galería fotográfica será expuesta a partir del 4 de julio en la Fundación Cultural de Providencia”.
¿Se viene “Misión Imposible Recargado” para el segundo semestre?
“Durante todo octubre y parte de noviembre pretendo volver junto a otros dos acompañantes al Monte Stoppani por un período mucho más largo (45 días), con el objetivo de alcanzar finalmente la cumbre de este glaciar, y si todo sale bien hacer otras cumbres vírgenes pertenecientes a un gran sector de Cordillera Darwin donde las montañas se mantienen inescaladas”.
EL EMPERADOR
Ya para el próximo verano, Cristian Donoso, planea una travesía desde la base chilena Bernardo O´Higgins con dos grandes conocidos, Ezequiel Lira y Roger Rovira, hacia el lado este de la Península Antártica a la isla Seymour donde hay una colonia de pingüinos emperadores, en una expedición de al menos dos meses que combina kayak con esquí.
A pesar de que maneja otras embarcaciones como yate o vela, Donoso Christie prefiere el kayak por su simpleza, “te obliga a estar en contacto muy directo con el mar, con lo que pasa en la superficie, es silencioso, discreto. Su tamaño y adaptabilidad te permite desembarcar en cualquier momento”, confiesa el también historiador y egresado de derecho de la Universidad de Chile.
Mientras planifica el itinerario de exploraciones para este 2018, además de las clases en la Universidad San Sebastián (sedes Santiago y Puerto Montt), Cristian Donoso es requerido por empresas, bancos y universidades para realizar charlas motivacionales en las que relata cómo la fuerza mental, la buena toma de decisiones y sobre todo el haber mantenido la calma en condiciones extremas lo mantuvo con vida.
Sin duda una vida con 42 años llenos de aventuras y que espera sean muchos más. De hecho, ahora mismo el también director de la ONG Andeshandbook está asesorando al Congreso en un proyecto de ley que mejore los accesos a las montañas. Todo un ejemplo de supervivencia, valentía, pero sobre todo, de valoración y cuidado por una tierra que aunque parezca hostil e inhóspita se ha transformado en el verdadero paraíso de Cristian Donoso.
Redacción: Cristian Muñoz Caces
Imágenes: Gentileza de Cristian Donoso