IG @kalei.wines
Con vasta experiencia adquirida en la región vitivinícola de Austria, la enóloga María Ignacia Echeverría nos enseña el proyecto que la enorgullece: Kalei, un vino de autor que nos transporta al lugar de origen mediante una experiencia única y sensorial.
Creación en movimiento, una búsqueda constante. Desde su etiqueta, a través de una imagen vívida y sinuosa, Kalei nos invita a explorar los sentidos. Un vino de autor de tiempo prolongado que nos transporta a su lugar de origen, al terroir, a los valles de Chile donde agricultores, enólogos y productores comparten una misma pasión.
Es la esencia de nuestro proyecto, inicia explicando la enóloga María Ignacia Echeverría. “La mayor parte del tiempo me dedico a viajar y a recorrer el país de norte a sur buscando viñedos, conversando con diversos productores y explorando tierras que contengan las condiciones para un vino único, de calidad”.
Kalei Wines nace en 2019 como una producción exclusiva hecha a escala humana. Un vino que, como una expresión artística de comunicar, nos transporta a su lugar de origen. “Si tu conoces el lugar desde donde proviene esa uva, entonces entenderás realmente el vino”, añade.
Provenientes en su mayoría de viñedos orgánicos, actualmente Kalei presenta cuatro variedades premium que inician con la sidra espumante de pera-manzana, elaborada bajo el método tradicional, donde la segunda fermentación del producto es en la botella misma. Le acompaña en su variedad de vinos un Cabernet Sauvignon del Valle del Maipo, Pinot Noir de Leyda y un Sauvignon blanc de Casablanca.
MOVIMIENTO
Para la enóloga María Ignacia Echeverría y el ingeniero comercial Nicolás Morel, Kalei proyecta una imagen enmarcada en el concepto del movimiento. “Sentimos que en este minuto esa es la característica que más nos define. Pero no solo por un tema físico de movernos entre un país u otro, sino también porque nuestro vino se encuentra en una etapa dinámica y creativa”, expresan.
Pese a trabajar los últimos diez años en Austria, en la región vinícola de Wachau, ambos se las han arreglado para realizar viajes anuales a Chile. “El que sean hemisferios opuestos nos permite estar de manera presencial en Europa y nuestro país en cada temporada correspondiente a la cosecha”.
Con la experiencia adquirida en la producción de vinos de clima frío – donde están principalmente los blancos y algunas variedades tintas como el Pinot Noir u otras cepas austríacas – la enóloga aporta en el proceso con una técnica de vinificación que se diferencia de otros vinos de importe nacional.
Un vino premium y exclusivo, que nos transporta al origen mediante una experiencia sensorial. Kalei logra cautivar el paladar de quien tenga el placer de probarlo. Un vino de autor que resulta de un proceso íntimo y creativo. Una verdadera copa de arte.