Contaba cuentos en la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela mientras estudiaba filosofía aunque sentía gran afición por las artes plásticas. Tales prácticas se fusionaron como caldo de cultivo para que Andrés Villarroel (34) incursionara en una innovadora metodología de aprendizaje para los más pequeños.
Muchas veces se concibe a la educación como un trámite – explica – enseñando mecánicamente y de memoria. “Nosotros queremos que los niños aprendan a resolver problemas gracias a la creatividad; pero a la vez, descubrimos que a partir del juego colaborativo y el arte evitamos la violencia, potenciando la autoestima, respeto y trabajo en equipo”, añade el fundador de PlastilinArte.
La organización educativa, ahora cien por ciento digital, cumple 11 años atendiendo a más de 15 mil familias al visitar Chile, Venezuela y 4 países europeos. Producto del coronavirus se vieron obligados a suspender desde marzo las actividades presenciales en colegios, parques, museos y centros culturales para volcarse a la enseñanza on-line.
¿Cuál es la metodología de enseñanza de PlastilinArte?
Nos valemos del juego, el arte y la creatividad. El trabajo artístico ayuda a desarrollar habilidades cognitivas, como la resolución de problemas, pero también habilidades motoras;
con talleres sencillos planteamos desafíos para que piensen y pongan a prueba su creatividad descubriendo que no hay una sola respuesta; a su vez, incorporamos el juego, dejando de lado la competencia en virtud de promover el trabajo en equipo.
PLASTILINARTE CUMPLE 11 AÑOS, HAN ATENDIDO A MÁS DE 15K FAMILIAS, VISITANDO 6 PAÍSES
Fomentan el reciclaje estimulando la creatividad de los chicos.
Nos parece importantísimo que los niños entiendan que la mayoría de los desechos domésticos (papel, cartón) poseen gran versatilidad para inventar cuanto te permita la imaginación. Y al combinar estos materiales con lápices de colores, plastilinas y témperas logramos resultados increíbles.
PlastilinArte nace el 2009 en Venezuela con actividades mayormente presenciales, pero todo cambió…
Actividades Venezuela en museos, centros culturales, colegios, hasta en heladerías. Al venirnos en 2017 a Chile, proyectábamos continuar con un formato similar.
Aunque efectuamos varias intervenciones en la V Región y Santiago, gradualmente fuimos capacitándonos en el mundo digital, invirtiendo en el desarrollo de nuestras plataformas virtuales. Ahora todo este proceso fue raudamente acelerado producto del estallido social y la pandemia del coronavirus, volcándonos definitivamente a esta nueva modalidad.
“En Plastilinarte creemos que la mejor manera que podemos enseñarle a un niño es jugando”, Andrés Villarroel, fundador.
Mencionabas como aspecto positivo la escalabilidad, ¿correcto?
Así es, al trabajar exclusivamente como plataforma educativa digital, podemos impartir nuestros talleres a más países, en especial a quienes nos conocieron presencialmente en un comienzo. Hoy nos siguen desde Miami, Ecuador, Perú, Argentina, Venezuela, Colombia, varias ciudades de Chile, México y familias latinas en Europa.
¿Cómo se las ingenian para trascender a la pantalla?
Hemos tenido que ser muy creativos para que los niños sientan que estamos junto a ellos y sus pares jugando en una mesa. Y aunque no es fácil romper la barrera de la pantalla, se logra a fuerza de inventar. Pero seguimos buscando alternativas para acercarnos cada vez más y acompañar de mejor forma a las familias en esta experiencia educativa a base de juegos y arte, donde todos somos niños hasta los 102 años.