Conjugar diferentes elementos para diseñar ambientes desde un relato, es el sello que caracteriza el trabajo de María José Manterola. Junto a su estudio Manterola, un equipo de diseñadoras y una arquitecta, han generado proyectos en diferentes lugares de Chile.
- Por Marcela Cademartori
- www.manterolainteriorismo.cl
- @manterola.interiorismo
Su sello es único e inconfundible. Da igual el lugar en donde el proyecto comience a gestarse. María José Manterola es una artista que logra imprimir su impronta a través de una muy bien pensada combinación de materiales, colores, elementos y texturas.
Lo que nació como una entretención de niña, hoy forma parte de su trabajo y el lugar desde donde la diseñadora industrial toma una importante tribuna para hablar de aquello con lo cual simplemente vibra.
“Desde chica el arte y la estética formaban parte de mi entorno familiar. Vengo de una familia a la que le gusta la decoración, especialmente a mi mamá, quien era artista y tenía amigas que trabajaban en el rubro. Cuando iban a la casa, cambiaban muchas veces todo lo que había. Salían a buscar muebles en tiendas y anticuarios, y como yo era la única hija de cinco hermanos, terminaba acompañándolas. Ahí descubrí el interiorismo”, recuerda María José.
Estudió Diseño Industrial con Mención en Muebles y Objetos. “Ello me permitió aprender de materiales, estructuras, muebles e iluminación, todos ámbitos que me llevaron, sin querer, cada vez más al interiorismo, que era una carrera que no se estudiaba en ese entonces”.
El siguiente paso de María José vino de la mano con el término de sus estudios, cuando comenzó a fabricar carteras y elementos de talabartería. Y por esas coincidencias que la vida presenta, los dueños de la marca italiana Gucci con representación en Chile, conocieron su taller y le ofrecieron trabajo. “Esta marca, que estaba en auge en Italia en los años 90, me acercó al mundo del diseño italiano y europeo. Esta familia trajo la representación de la marca para vender sus colecciones italianas en Chile. Yo trabajé en las compras, en la definición de los productos, en las vitrinas y en las tiendas”.
Pero para la profesional vendrían nuevos desafíos. Esta vez su rumbo se direccionó hacia el desarrollo de pilotos, a lo que siguió la decoración de las oficinas de los dueños de las inmobiliarias, de sus casas y otros proyectos fuera de Santiago. Fueron más de 20 años de trabajo hasta que llegó la oportunidad de formar su propia oficina, Manterola Interiorismo, desde donde nos entrega su visión de las tendencias que permitirán que tus espacios se construyan en base a un relato con sentido.
EQUILIBRIOS
La elección de los elementos que servirán para dotar a los ambientes de sensaciones que inspiren calma, confort y bienestar, es la fórmula con la cual María José aborda proyectos, en los cuales la frescura y la atemporalidad se convierten en un patrón de base.
“No me gustan los espacios muy cargados. Me inclino por incorporar elementos contemporáneos y clásicos que tengan una historia, de manera de enriquecer los ambientes y sorprender con los resultados de la fusión”.
Para la profesional, trabajar sobre una base neutra, es esencial, para desde ahí comenzar a construir la identidad que conformará el interiorismo de cada proyecto. “La base neutra me permite agregar diferentes colores y texturas naturales, para que cada espacio sea único y diferente, de acuerdo al estilo y personalidad de cada cliente. También es importante la presencia de elementos naturales como las plantas, y el arte para entregar un toque moderno y contemporáneo a los espacios”.
En cuanto a tendencias, María José explica que espacios 100% blancos ya no es requisito para lograr ambientes limpios y que evoquen calma. En su reemplazo aparece el color. “En tendencia llega el verde en tonos luminosos, a la vez terrosos y cálidos; el azul aguamarina, que es un mix de azules y verdes que nos devuelve a la naturaleza y al agua; y el terracota continúa, pero en una versión mucho más cálida y suave”.
El mobiliario, por su parte, da cuenta de formas orgánicas, con presencia de la curva, por ejemplo, en los respaldos de los sofás y sitiales. “Hay también una tendencia por maderas claras, muebles livianos y multifuncionales como una respuesta a la evolución de la vida moderna. Los espacios pequeños y la necesidad de flexibilidad en ellos están llevando a opciones que sirven para múltiples propósitos”.
Y en cuanto a elementos como vegetación y uso de luz, María José nos entrega su propuesta. “Hay una inclinación por incorporar la naturaleza para traer el exterior hacia el interior. Se busca incorporar el color y la luz que esta aporta para encontrar el equilibrio y la tranquilidad. La naturaleza como parte de un interiorismo ha sido una tendencia constante en los últimos años, y continuará para este próximo periodo”.
Pero más allá de una moda, María José, junto a su equipo de profesionales, busca la implementación de espacios como punto de inicio, la interpretación como la herramienta, y espacios representativos como una meta final que da cuenta de ambientes que se visten de una narrativa con identidad.